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El PVC es un polímero termoplástico único, que lo convierte en uno de los plásticos con más usos del mercado.
Es una opción atractiva para tus productos personalizados, ya que tiene un coste bajo de fabricación y resiste condiciones exigentes.
¿Te has preguntado alguna vez de qué están hechos los objetos que tocamos día a día? Esas botellas de agua que te acompañan en el gimnasio, los envases de comida que hemos comprado en el supermercado, o incluso la funda de tu teléfono móvil… Pues es bastante probable que estos artículos estén hechos de PVC.
El policloruro de vinilo fue descubierto a mitad de la década de 1830 por Henri Victor Regnault (aunque no tiene nada que ver con la marca de coches) pero, no fue hasta 90 años después, cuando comenzó a utilizarse con popularidad. Esto se vio durante la Segunda Guerra Mundial, con sus aplicaciones en aviones y otros usos militares.
Con el final de la guerra, el PVC empezó a utilizarse con fines comerciales, como los conocemos hoy en día, y cubriendo todo tipo de industrias como la construcción, la electrónica, la medicina, el arte… El objetivo de usar este termoplástico es conseguir un material resistente y económico que cada vez es más reciclable, lo que lo convierte en una opción duradera y rentable frente a otros materiales.
Este tipo de plástico se suele utilizar mucho, por lo que lo podemos ver en muchos de los objetos que tocamos día a día. Por eso, aquí te detallamos algunos de los sectores donde se utiliza el PVC:
No solamente se construyen revestimientos para puertas o ventanas con el PVC, sino que también te ayudan a dejar tu salón aesthetic con su revestimiento en techo y suelos, las persianas o hasta los canalones (que no canelones) para que no se te llene la casa de agua. Pero también está en zonas del hogar ocultas, como son las tuberías y sistemas de drenaje, ya que es un material bastante resistente y con facilidad de instalación.
Este es el uso más común y con el que más estamos en contacto, y que va desde botellas personalizadas, bandejas de blíster, envases de alimentos, bolsas de calor personalizadas o láminas de envoltura.
Los coches y demás vehículos están hechos, en su interior y exterior, con partes de PVC. Esto se debe a que es un material muy resistente y seguro (es útil si tu coche va a pasar muchas noches en la calle a la intemperie).
A la hora de cargar nuestro ordenador o móvil, los cables que estamos tocando no producen ninguna descarga eléctrica gracias a este policloruro de vinilo. Pero además, esas fundas de móvil personalizadas tan adorables que llevas también tienen un compuesto de este material.
No te preocupes, las medicinas y pastillas que tomas no llevan estos plásticos, pero sí las bolsas de sangre, catéteres y una gran variedad de dispositivos médicos.
El PVC es responsable de que la casa te quede muy instagrameable (y tu buen gusto decorándola, claro). Muchos de los paneles decorativos presentes en los hogares están hechos con este plástico, además de las láminas de PVC o el revestimiento en suelos y techos.
Ya nos ha quedado claro que es una maravilla, y que todos los días usamos cosas con PVC pero, ¿por qué destaca frente a otros materiales? Aquí hay una lista de razones por las que elegirlo. Es tan duro que es capaz de soportar impactos, humedad y corrosión, por lo que no hay ningún problema en utilizarlo en objetos que van a estar bajo el sol, lluvia o nieve, o si van a estar dentro de casa y se llevan algún golpe.
Es un material más barato de producir que sus materiales sustitutivos a lo que, sumado a su larga vida útil, hace que el producto final aguante más tiempo y con un coste más reducido. Resiste la corrosión y productos químicos, por lo que es normal verlo en las tuberías de todos los lugares, desde casas a oficinas o laboratorios. Es un material versátil, lo que nos permite encontrarlo en diferentes formas y aplicaciones, como bolsas para regalos, balones personalizados y otras muchas cosas.
Ya sabemos que el PVC es nuestro mejor compañero, que siempre está con nosotros en todas partes, pero como no todo es blanco o negro, sino que también hay grises, aquí dejamos una lista con todos los pros y contras del PVC.
Para hacerlo se utiliza menos energía que con otro tipo de materiales parecidos, por lo que es muy eficiente.
Mantienen el mismo, o mayor, rendimiento que otros materiales y utilizan menor materia prima para su elaboración.
Gracias a la flexibilidad de los materiales elaborados con PVC y su dificultad de roturas, es un material preparado para aguantar mucho tiempo.
Tiene un alto impacto en la naturaleza porque contamina más que otras materias primas, ya que, durante su fabricación, pueden soltar emisiones tóxicas y contaminantes.
Pese a que el PVC es reciclable, no todos los centros de procesado están preparados para ello, por lo que puede ser un problema la gestión del final de la vida útil de los productos.
Los productos de PVC no tienen un gran catálogo de variedad de colores, pese a que en los últimos años la personalización de estos productos ha ido aumentando mucho.
Ahora que ya conocemos qué es el PVC y sus propiedades, podemos identificar los diferentes tipos de PVC que existen.
Es el más utilizado en la industria textil, pero además también se encuentra en objetos como juguetes, films y objetos inflables, entre otros. Destaca por ser blando y flexible, preparado para soportar tirones y golpes.
Se encuentra en los marcos de ventanas y tubos de calefacción principalmente. Esto se debe a que puede soportar condiciones como la abrasión, el fuego o la intemperie de manera eficaz.
Es el responsable de que tengas la casa más bonita de todo el vecindario, ya que se utiliza en revestimientos decorativos y paneles de pared, ya que son suaves y esponjosos. Esto también supone que no sean los mejores materiales para situaciones del entorno duras, porque se pueden dañar muy fácilmente.
Las tuberías que te llevan hasta la ducha el agua caliente están hechas de este material por su capacidad de resistir las altas temperaturas y la corrosión, por lo que son las más utilizadas en tuberías de agua caliente y tubos de laboratorio.
Tiene una textura parecida al cartón, lo que lo convierte en un material perfecto para ser manipulado y cortado. Se utiliza principalmente en paneles de construcción, displays publicitarios y rotulaciones.
Por lo tanto, el anodizado es ideal para aplicaciones en las que se requiere una alta resistencia a la corrosión y una buena apariencia, como en la fabricación de piezas de bicicletas, equipos de fotografía e incluso material de escritura elegante, como por ejemplo el bolígrafo Moneta o el bolígrafo Kruger.
El PVC se adapta a todo tipo de objetos, lo que permite que esté presente en nuestra vida cotidiana. Desde juguetes hasta accesorios, aquí tienes algunas de nuestras opciones con más éxito:
Una vez ya has elegido los productos con PVC, solamente falta añadir tu logo para dejar a todos boquiabiertos, sorprendiendo a empleados y clientes. Así que, aquí te dejamos las mejores opciones para personalizar todos tus productos de PVC fácilmente.
Es una de las técnicas más utilizadas a la hora de personalizar productos de policloruro de vinilo. Tiene una gran variedad de colores y se adapta muy bien a diferentes formas, dando lugar a logos perfectamente plasmados. Además, como imprimir la serigrafía es rápido y eficiente, los costes de producción son menores que con otras técnicas de impresión.
Gracias a la almohadilla de silicona que utiliza, ninguna superficie o producto se le escapa a esta técnica de impresión. Es ideal para que los logos con detalles finos queden muy bonitos y, con su secado rápido, el producto estará en tus manos mucho antes que con otras técnicas.
Si tienes un logo sencillo y geométrico, la técnica de personalización de la etiqueta digital es tu solución.
Su característica diferencial es que es posible imprimir etiquetas para cada producto en concreto, dándote una mayor flexibilidad y adaptabilidad en la personalización de cada producto de PVC.
Se usa principalmente en ropa, pero se puede aplicar en algunos productos de PVC. Hay que mirar bien que sean objetos resistentes al calor para que no se deformen durante el proceso. La personalización con transfer digital en PVC es una opción rentable para pequeñas cantidades de productos, pero es probable que haga falta más tiempo para que el producto esté terminado que en otras técnicas de impresión.
Ahora mismo todos somos fans del PVC pero, ¿cuál es la diferencia frente al CPVC y el aluminio?
Coste de fabricación superior al PVC
Recomendado para temperaturas superiores al PVC, ya que está pensado para aplicaciones de alta temperatura.
Al ser una modificación del PVC, el CPVC es menos flexible y versátil.
Coste de fabricación económico
Se recomienda su uso para temperaturas inferiores a 60°C, si no, podría deformarse el producto.
Tiene diferentes grados y formas de versatilidad, en función del tipo de PVC.
Coste de fabricación más elevado que el PVC
Tiene una gran resistencia a todo tipo de temperaturas, lo que lo hace adecuado para aplicaciones de alta y baja temperatura.
Es menos flexible que el PVC, pero su flexibilidad varía en función del grosor y cómo se procesa.
Gracias a lo mucho que dura este material y lo económica que es su producción, el PVC nos acompaña, como nuestra sombra, a todas partes. Por ello, hay algunas organizaciones que certifican su autenticidad y calidad. Algunas de las principales certificaciones del PVC:
En conclusión, el aluminio es un material versátil que ofrece muchas ventajas en comparación con otros metales. Su alta resistencia a la corrosión, su bajo peso y su excelente conductividad térmica y eléctrica lo hacen ideal para una amplia gama de aplicaciones.
Además, el aluminio se puede personalizar fácilmente utilizando una variedad de técnicas de marcaje, lo que lo convierte en una opción popular para productos personalizados.
El aluminio también es un material respetuoso con el medio ambiente, ya que es reciclable y puede ser utilizado en la fabricación de productos sostenibles. Además, su bajo coste de mantenimiento y larga vida útil lo hacen una opción económica y duradera para muchas aplicaciones.
En resumen, si estás buscando un material resistente, ligero y personalizable para tus productos, el aluminio es una excelente opción.
Con sus numerosas ventajas, el aluminio es perfecto para una amplia variedad de productos personalizados, desde material de escritura y placas de identificación hasta botellas y componentes de productos electrónicos.
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