Los tipos de delantales personalizados son como la vestimenta de los superhéroes, pero para los trabajadores. Cada uno tiene su propio poder. Y esto, no solo conlleva una gran responsabilidad, sino que implica la necesidad de un traje único que se adapte a ellos. Al igual que estos, cada profesión requiere de su propio delantal adecuado para su actividad.
Todas las personas tenemos una misión y aunque no sea salvar el mundo de un malvado villano, las tareas laborales que a diario realiza cada trabajador hace que la vida siga funcionando. El uniforme de un superhéroe y el de un empleado tienen muchas similitudes. Ambos deben ser cómodos, permitir la movilidad y proteger al que lo porta.
Pero la característica principal, el motivo por el que con un solo vistazo sabemos que Batman no es el héroe más sociable y alegre, es que su vestuario define su personalidad. Refleja su superpoder, sus puntos fuertes, su identidad, etc. De la misma forma, los delantales son un identificador de marca y son capaces de transmitir los valores, los principios y la misión de la compañía.
Si este accesorio de uniforme es una herramienta de comunicación tan influyente, ¿Qué tipo de mandil debemos utilizar? ¿De qué manera podemos sacarle el mayor partido? ¿Influye cómo se usa?
Tipos de delantales personalizados según tu profesión
Sabemos que cada profesión tiene sus propias necesidades y requisitos en lo que respecta a la vestimenta de trabajo, y los delantales no son la excepción. Por eso, aquí te presentamos una lista de los tipos de delantales personalizados que se adaptan a diferentes profesiones para que puedas elegir el que más te conviene.
Delantal de cocina
Entre los delantales de hostelería encontramos los aquellos destinados a la cocina. Este puesto de trabajo emplea herramientas de corte, se encuentra en lugares cercanos a fuentes de calor y es propenso a ensuciarse, por lo que, deben estar hechos con materiales de calidad.
Aunque hay muchos tipos de mandiles, se recomienda utilizar aquellos que sean largos y que cubran una gran parte del cuerpo para mayor protección. Como es un empleo que requiere de limpieza, se suelen usar delantales blancos para ver con rapidez las manchas. Además, el delantal de cocina debe ser cómodo y poder ajustarse al cuerpo para facilitar la movilidad.
Mandil de camarero
Mientras los delantales que se usan en cocina deben ser resistentes, el mandil de camarero está más enfocado al diseño y la imagen de marca. Este puesto es la parte visible del negocio, es el que está en contacto directo con el cliente y, por tanto, gran parte de su posicionamiento se origina a través de esa persona.
Este artículo refleja la identidad de la empresa, por lo que, debe estar siempre limpio y bien colocado. Los delantales de poliéster y algodón son los más adecuados para esta profesión, pues son transpirables y confortables. Del mismo modo, se recomiendan los mandiles cortos o delantales largos de rodillas, ya que mantienen su forma y son fáciles de conservar, facilitan una percepción de profesionalidad e higiene.
Delantal para jardinero
Al contrario que las demás profesiones, los jardineros y floristas están en contacto con la naturaleza. De esta forma, es aconsejable emplear un delantal de peto para cumplir con la seguridad de la plantilla o aquellos que dispongan de bolsillos para guardar los pequeños utensilios.
Los delantales estilo vintage son muy comunes para seguir con la estética de la ocupación. Del mismo modo, emplear materiales naturales o reciclados que sean respetuosos con el medio ambiente proporcionará mayor coherencia.
Delantales personalizados
Los delantales son una poderosa herramienta de marketing y más si los personalizamos con las características de nuestra identidad. Ya sean los mandiles para un negocio o delantales para ferias y congresos, es importante cuidar los detalles para trasladar lo mejor posible los valores de la compañía. El cliente no solo se llevará una imagen positiva, sino que influirá en el recuerdo.
Cómo escoger el tipo de delantal idóneo para tu empresa
Como hemos visto, existen varios tipos de mandiles según las distintas finalidades. Con tanta variedad, pueden surgir dudas sobre qué modelo o clase es el que más nos conviene. Así pues, para escoger aquel vestuario que mejor se adapte a nuestra compañía, hay que tener en cuenta tres factores:
Los materiales: Hay que considerar qué material es más apropiado y cuál resistirá mejor la actividad. Por ejemplo; los delantales de algodón son recomendables por ser menos inflamables, los hechos con PVC son bastante impermeables y los delantales de poliéster tienen una gran durabilidad.
El diseño: la estética es muy valorada en todos los sectores. Los uniformes laborales son una necesidad, pero también son un elemento del branding. Para personalizar delantales corporativos hay que seleccionar el tamaño y la forma y al mismo tiempo cómo expresa la esencia de la marca.
La efectividad: La apariencia no está reñida con la funcionalidad. Proporcionar higiene, prevenir posibles riesgos laborales como cortes o quemaduras y evitar las manchas son consecuencias que hay que sopesar desde primera instancia.
Consejos para el uso del delantal personalizado
Si queremos que el mandil tenga una larga duración, se conserve perfectamente en el tiempo y además, sirva a su función como método de comunicación, hay que tener en consideración su utilización.
En primer lugar, es mejor no usar el mismo delantal para todas las tareas. Si las labores son muy diferentes entre sí y se ubican en sitios distintos, es recomendable tener uno para cada ocupación. Y para que esto sea más eficiente, es aconsejable proporcionar un espacio apto para que sea accesible un cambio rápido.
Los empleados deben disponer del material desde el primer día de trabajo y tener un punto acondicionado para ubicar el delantal. Además, si los materiales son de calidad, obtendremos mayor protección y se conservará de forma sobresaliente. Para ello, también ayudará a que sean cómodos. La ergonomía de la vestimenta influirá en su duración debido a su adaptabilidad a los movimientos.
Lo importante no es adquirir un delantal que tenga el logo de la compañía, sino más bien, elegir el adecuado. Y para eso, hay que plantearse como elementos esenciales el diseño, los materiales y su efectividad antes de empezar con su creación.
Cada puesto de trabajo tiene unas necesidades, por lo que los delantales deberán cubrir estos requisitos. Un chef necesitará que proteja su ropa de cualquier salpicadura. En cambio, un mecánico preferirá uno resistente al aceite y a las manchas. Y un artista querrá desatar su creatividad con un diseño único. Y para ello, ¡hay un delantal para cada profesión y personalidad!